"Mujeres que Revolucionaron la Música Latina"
Reinas de la Salsa.
El primer recuerdo que tengo de ver cantar a una mujer fue cuando nía como tres años, en mi barrio Lawton de La Habana.
Esa mujer no era nada más y nada menos que Celia Cruz, quien fuera mi madrina de bautizo y gran amiga de mis padres. En esa ocasión tengo el vivido recuerdo de que me sentó en sus piernas y me dio un beso antes de salir a cantar.
Estaban inaugurando un centro de salud y ella lo amenizó junto a su querida Sonora Matancera.
No fue la última vez que la vi, pues antes de irse de Cuba me regaló cuerdas y un arco para el violín que mi padre había encontrado en la basura, y me hizo prometerle que llevaría nuestra música y nuestro legado por el mundo.
Años más tarde pude ser testigo del reencuentro con mi padre en el exilio y después tuve la bendición de compartir con ella cuando formé parte de “La Fania All-Stars”.
Celia fue y será “The Queen of Salsa” .
Ya viviendo en Europa tuve el placer de ser su director musical y viajar junto a ella y Pedro Knight, su esposo, por muchos países y ciudades del Viejo Continente. También hice la banda sonora de su serie que fue transmitida en todo el planeta. Para mí, no ha habido ni habrá otra estrella como Celia y hoy, 21 años después de su partida, sigue siendo la número uno.
Empecé a escuchar a otras mujeres que sobresalían en un mundo regido por hombres...
A los 12 años, cuando me volví profesional, empecé a escuchar a otras mujeres que sobresalían en un mundo regido por hombres.
Una de las más importantes, y podríamos decir que llevó nuestra música a la “Salsa Dance Evolution”, fue Guadalupe Victoria Yoli Raymond, más conocida como “La Lupe”.
Su fuerza al cantar y su expresión corporal hizo que muchos la tildaron de loca y otros aseguraban que era poseída por espíritus malignos.
Las veces que vi a La Lupe en “El Teatro Puerto Rico” del Bronx sentí su capacidad de transmitir y enloquecer al público. Una de las pocas que cruzó al mercado anglo. Su carácter fuerte hizo que le cerraran puertas y eso la marcó mucho.
Tito Puente fue quien la llevara al éxito pero su relación con él también terminó mal.
Para mí, una de las figuras femeninas más fuertes del “Latín Dance ’60s” fue La Lupe.
A mis doce años tambien comence a frecuentar y tocar en los clubes de New York!
Me encantaba la orquesta de “Machito y sus Afro Cubans” ya que combinaba el jazz con los ritmos cubanos.
Dirigidos por el gran Mario Bauzá presentaban unos arreglos musicales increíbles, pero una de las cosas que más me llamaba la atención era Graciela Pérez, la vocalista del grupo y hermana de Machito. Graciela tenía un estilo único y todos la amábamos. Siempre fue amable y cariñosa conmigo, algo que recordaré el resto de mi vida. No había un domingo, en que no estuviera tocando, que no fuera a “El Corso” a oírla.